11.13.2009
Misery
EE. UU., 1990
Dirige Rob Reiner.
Actúan Kathy Bates, James Caan y Richard Farnsworth.
Dura 107 min.
¿Se han hecho tan fanáticos de alguien que, de repente, se vean siguiendo cada uno de sus pasos, acechándole, raptándole y asi? En este mundo globalizado y con acceso a la información personal de quien usted elija, es de las cosas más fáciles y satisfactorias que se pueden lograr. Pero en 1990, cuando no había messenger ni Facebook, llevar a cabo un proceso como el anterior requería de toda la perspicacia posible además de mucha paciencia. Veamos cómo lo logró Annie Wilkes y no olviden tomar notas.
El escritor Paul Sheldon acaba de terminar su última obra, una novela que se aleja de la eterna saga de relatos románticos por los que se había hecho famoso, Misery. Ahora que ha puesto el punto final, regresa a publicarla a Nueva York pues siempre prefirió escribir en un lejano bosque aislado del mundo. Error # 1. Se apresta a empacar, pagar la cuenta de la cabaña y salir como alma que lleva el diablo, pero hay una ventisca y los caminos se han convertido en una verdadera trampa mortal, sin embargo él pierde cuidado y continúa su viaje. Error # 2. Como era de esperarse, tiene un accidente que lo deja fuera del camino e inconciente. Error # 3.
Unas horas más tarde, despierta abrigado en la cama de una amable mujer que dice ser su fan número uno y quien también es una enfermera retirada. Paul le agradece por sus atenciones y vendajes, pero se cuestiona cómo lo encontró y qué hace ahi. Annie le cuenta que ella es la única persona cercana a esa parte del camino y que el clima no permite que lo lleve a un hospital, pero en un par de días todo debería regresar a la normalidad, mientras tanto, ella ya ha avisado a la policía y a su agente. Paul ya no se preocupa. Aprovechando que el escritor está despierto, Annie le dice que le apena ser tan metiche pero que no pudo evitar ver entre sus cosas la nueva novela, pero que no la ha hojeado pues necesita su permiso. Paul está tan agradecido con ella y, tomando en cuenta que es su super fan, le autoriza a leer el manuscrito. Error # 4. Durante la siguiente hora de la comida, Annie le comenta que no le entusiasma su nuevo trabajo, dice que es un estilo muy alejado a lo que él hace y que las malas palabras son harto desagradables, Paul intenta justificarse pero ella pierde los estribos y destruye el manuscrito original.
Un día más pasa y Annie llega corriendo a contarle a Paul que por fin compró la última entrega de Misery, no aguanta la emoción y en una sentada la lee. Por la noche irrumpe histérica en la habitación de Paul, no puede creer que en ese último libro la heroína acabe muerta. ¡Eso no puede estar pasando! Paul le explica que sólo es ficción pero eso sólo enoja más a la enfermera Wilkes. Error # 5. Más turbada que nunca (sic), Annie golpea y sacude la cama del aún maltrecho escritor y le exige que escriba una nueva entrega de Misery, que a ver cómo le hace, pero la protagonista no puede morir. Paul, que se cree el muy muy, le dice que no lo piensa hacer y que además la policía debería llegar al siguiente día... Annie, en cambio, le confiesa que nunca avisó a las autoridades ni a su agente, que nadie presenció el rescate y que si no lo hace, nunca saldrá de ahí con vida: deberá escribir una nueva Misery sólo para ella.
Mientras tanto, Lauren Bacall que es agente de Paul Sheldon, consigue alertar al alguacil del pueblo vecino donde se supo de su cliente por última vez. El hombre se apresura a buscar todo lo referente con el novelista. Por casualidad encuentra un diálogo en Misery que le recuerda mucho el caso de una enfermera asesina de niños décadas atrás, quien dice ante la corte las mismas palabras que se citan en el libro y ahí comienza a sospechar.
Paul mientras consiguió acabar la nueva novela ante la aprobación de la loca Annie, que antes le había partido los tobillos por su intento de escapar. El alguacil llega a ver a la ex-enfermera y cuando casi salva a Paul, ella le da con la escopeta. Un balazo, no un escopetazo. Paul Sheldon por fin tiene una buena idea y convence a Annie de esperar una noche más, luego los dos podrán suicidarse juntos porque eso se hace cuando uno acaba de escribir. La engaña, le pega con la máquina de escribir y un cerdo de bronce, Annie Wilkes se muere y el escritor escapa a vivir nuevamente en NY.
Misery, contrario a lo que su nombre indica, no trata sobre la miseria sino de la opulencia: un escritor que tiene todo lo que siempre quiso a través de obras que ni a él le gustaban pero ¡qué bien vendían!. Luego nos habla de la obsesión de Annie quien es una sicótica altamente violenta y medio border (ay nanita...), pero que sólo busca vivir a través de la fantasía de las novelas románticas y las medicinas de patente. Adaptada de una novela de Stephen King, Misery nos recuerda por qué es siempre bueno avisar con quien vamos a estar y a qué hora vamos a llegar, implantarnos un chip de búsqueda satelital y manejar siempre por la derecha.
Siempre suyo... Roi.
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1 comentario:
La escena de los tobillos!!!
...God, I love you.
(si me gustara el tabaco, fumaría ahora =>fohhhh )
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